El número de la venta de casas en ejecución hipotecaria cayeron por casi un tercio en el tercer trimestre del 2011, con respecto a un año anterior, en los condados de Nassau y Suffolk, de acuerdo a un reporte de RealtyTrac. La declinación, según los expertos, refleja una postura menos agresiva de los bancos, debido en gran parte al escándalo de los robos de casas a los propietarios a través de los papeleos realizados en las ejecuciones hipotecarias, y podría retrasar una recuperación eventual en los precios de venta en general, en tanto la venta de casas embargadas continúen influenciando el mercado.
Otro factor más pequeño puede ser una buena voluntad cada vez mayor de los bancos para modificar las hipotecas, según notaron algunos observadores de bienes raíces.
Las ventas de 580 casas embargadas en Long Island, de julio a septiembre pasados, marcan una caída del 32 por ciento, comparado al mismo período del 2010, según los datos de RealtyTrac dados a conocer el pasado 27 de enero. Esa figura incluye ventas de casas poseídas por los bancos, así como las que están en el proceso de una ejecución hipotecaria que no se han sido recobradas por el banco —una categoría que incluye típicamente los “short sale”, o las ventas de una casa por menos de lo que es debido, dijo Daren Blomquist, vice presidente de RealtyTrac, según el Newsday.
Durante el mismo período, las ventas de propiedades poseídas por los bancos en la isla bajaron en más de la mitad, comparado al mismo período anterior del año, de 254 a 124.
Las ejecuciones hipotecarias en Long Island se han retardado desde el 2010, cuando los bancos fueron requeridos a proporcionar más documentación para probar de que tenían el derecho legal para reposeer las casas.
Los bancos “están tomando más tiempo para comenzar el proceso de una ejecución hipotecaria, y una vez que el proceso comienza, están tomando más tiempo para finalizarlo”, dijo Blomquist.
No es índice de mejoría
Y el hecho de que se vendan menos casas embargadas en la isla, no es un índice de mejoría económica en la región. “No pienso que la reducción sea un indicio de que pocas personas están en problemas” económicos, dijo Michael Wigutow, abogado supervisor en Nassau/Suffolk Law Services.
El Long Island Housing Partnership no ha visto ninguna reducción en el número de dueños de una casa que buscan ayuda para evitar el embargo de su propiedad, dijo Peter Elkowitz, presidente y jefe ejecutivo de la entidad, según el Newsday. Suffolk tiene el mayor número de ejecuciones hipotecarias en el estado de Nueva York, y Nassau está en el tercer lugar, dijo.
Sin embargo, los bancos están más abiertos en modificar las hipotecas, haciendo más ligero el proceso y empleando a más gente en los centros de llamadas, dijo Elkowitz.
Los precios de casas aún en declive
Los reportes de dos agencias de corretaje de propiedades inmobiliarias en Long Island, demuestran que el mercado de viviendas aún está luchando por salir a flote en la región.
Las ventas pendientes –casas en contrato– cayeron en un 7 por ciento (a un total de 4.134 contratos) en el cuarto trimestre del 2011, por debajo de los 4.447 contratos en el cuarto trimestre del 2010, según el informe más reciente de la agencia de corretaje Prudential Douglas Elliman y del tasador de propiedades Miller Samuel.
El precio promedio de las casas vendidas era de $339.000, un 4.8 por ciento menos del precio promedio de $356.050 de hace un año. El tiempo para vender una casa también se ha alargado. El tiempo promedio que una casa está en el mercado antes de ser vendida fue de 130 días en el cuarto trimestre del 2011, mientras que era 119 días en el mismo periodo del 2010.
El informe también comparó los números de casas del 2011 con los del 2002 y encontró que más de la mitad de las 34.466 casas vendidas el año pasado en Long Island –17.409 fueron vendidas hace una década. El precio promedio de venta, ahora en $350.000, es un 20 por ciento más que el del 2002, cuando el precio de venta promedio era de $290.000.